En el marco de un clima de auténtico desorden pero al mismo tiempo íntimo por el escenario seleccionado para su misterioso anuncio, Steve Ballmer, director general de Microsoft acaba de hacer la presentación oficial de su anticipada tablet, la nueva Surface, misma a la que el emblemático ejecutivo se refirió como la máxima integración entre software y hardware, así como el futuro compañero de Windows 8.
“Creemos que toda intersección entre humano y máquina puede mejorarse cuando cada aspecto de la experiencia, hardware y software, se consideran juntos,” explicó Ballmer. “Esta es la nueva Microsoft Surface. Surface satisface el sueño de trabajar en todo lugar. Surface es tu divertimento, tu creatividad y tu productividad,” agregó en el marco de una andanada flashes y aplausos de la limitada pero selecta audiencia que se dio cita en los Milk Studios en la ciudad de Los Ángeles.
El dispositivo de 9.3 mm de grosor, habilitado con interfaz USB 3.0, carcasa de magnesio o VaporMg, 576 gramos de peso, optimizado para Windows 8 y pantalla Clear Type HD Display de 10.6 pulgadas, vendrá protegido con material sintético (Gorilla Glass 2); supuestamente tendrá la mejor conectividad WiFi MIMO (dos antenas) y lo acompañará una singular cubierta magnética de 3 mm de espesor, que fungirá a la vez como teclado y a la cual se bautizó Type Cover –vendrá en varios colores, por supuesto–.
Surface dispondrá de conectividad HDMI, DisplayPort y cámaras frontal y posterior. Habrá por lo menos dos modelos, uno armado con el sistema operativo RT (ya sea de de 32GB o 64GB de memoria) y otro con Windows 8 Pro (ya sea en su presentación de 64GB o 128GB de memoria). La tablet soportará procesadores Intel y ARM Nvidia. Se podrá escribir directamente sobre la pantalla, haciendo uso para ello de un bolígrafo especial de corte Stylus que trazará fina tinta digital con grosor de 600 dpi, y el cual se podrá adherir magnéticamente al borde de la tablet.
Los múltiples presentadores que tomaron el estrado luego del anuncio principal hicieron énfasis en la minuciosa atención al detalle que se puso al diseño del aparato, asegurando que “cada micrón importa con Microsoft Surface”, una tablet sólida pero de acabados muy suaves y un diseño ergonómico, justo como un libro, resaltó la compañía.
“Estamos muy orgullosos de Surface, así como lo estamos también de Windows 8,” agregó Ballmer. “Gracias a Windows 8, Surface es una PC y Surface es una tablet,” concluyó.
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